Nelson Mandela
"Lo difícil no es cambiar la sociedad, sino cambiarse uno mismo"
Asistimos con estupor aunque no nos sorprende el descaro, a un nuevo atraco al distrito norte de Granada, concretamente a Almanjayar. Muchas y muchos se llenan la boca defendiendo estos barrios olvidados para meramente hacerse su campaña pero ante el último escándalo producido en este barrio la callada es la respuesta.
Tratar a los desfavorecidos como si fueran clientes, manipularlos y ocultar este atropello producido ayer por el gobierno dirigido por una mujer que no por serlo ni es más igualitario ni mucho menos más justo y solidario con las barridadas más vulnerables de Andalucía es otra muestra más como actúa el sistema político actual asentado en los que han provocado esta crisis estafa.
Somos muchos los que llevamos años luchando por sacar a norte de la exclusión social, que somos activistas sociales, y no utilizamos nuestra profesión para ponernos falsas medallas de la protección social, muchos colectivos invisibilizados que tienen en su haber vivir y conocer la realidad de un distrito al que siempre se le han puesto parches en lugar de soluciones radicales para salir del olvido. Porque sí, ser radicales es ir a la raíz de las cosas y hay demasiada indignación en tantos y tantas vecinas que ven como su voz y sus denuncias se ocultan siendo los legitimados para ser escuchados. Es más demagógico hacer propaganda facilona de hechos puntuales y tomar una vereda y que como dice el dicho, cuando la vereda se acaba el tonto sigue. Nada nuevo bajo el sol. Hay quien se aferra a hacer populismo barato en lugar de mirar de frente a esos a los que dice defender.
30 años de gobierno andaluz supuestamente de izquierdas y no han sido capaces de ejecutar ni el plan estratégico de la zona norte ni mucho menos tener en cuenta el demandando por la plataforma ciudadana zona norte, que no es estratégico, sino integral, que es como deben tratarse los problemas derivados de la marginación y la exclusión social, pero es que ese partido solo se refleja en quien le da pávulo, no en la totalidad, ni las revidincaciones de la asociación de parados del parque 28 de febrero, ni de mujeres cartuja, ni de esos curas obreros maravillosos como Julio y Paco, nada, ellos ni ellas existen. Y mucho menos los que aún son más invisibles por no estar organizados en plataformas o asociación alguna.
Aún recuerdo cuando el candidato a la alcaldía de Granada por IU, Paco Puentedura viajó con la plataforma zona norte a Bruselas para pedir que se considera el distrito norte como zona a proteger como derecho humano, el rodillo de la inoperancia y la incompetencia fulminó sus esperanzas. Aún recuerdo como Willy Meyer, un gran luchador contra las injusticias y el olvido, pasó en varias ocasiones por este distrito olvidado, para poder tomar conocimiento in situ del abandono y plantear su defensa en el parlamento europeo.
Llegó IU al gobierno andaluz y se tuvo muy claro para quien se gestionaba en los escasos espacios que nos dejó el socio de gobierno: para las clases sociales más empobrecidas, para los excluídos, para los pequeños comerciantes, para el transporte público decente, sostenible y de calidad, para fomentar el turismo, para no olvidar a nuestros muertos en las cunetas, para terminar con la estafa de la colaboración público-privada...
Y para Granada muchos se lo pusimos claro a nuestros compañeros/as en el gobierno, aunque obviamente también para ellos era prioridad, en lo referente al distrito norte de Granada. Manuel Morales, ex delegado de fomento y vivienda, residente en Casería de Montijo desde hace más de 20 años y conocedor a la perfección del diagnóstico en norte lo tenía claro, y por eso puso todo su esfuerzo en defender el derecho a la vivienda en nuestra ciudad, como el resto de compañeros/as en toda Andalucía, sabíamos, y sabemos, que es un derecho, no un negocio, no un lujo, sino una primera necesidad, y por eso se frenaron 628 desahucios en Granada, se acabaron los desahucios en viviendas públicas compensando el alquiler con trabajo comunitario y sacando a alquiler social todas las viviendas de la Junta de Andalucía.
Hasta que la candidada del Psoe a la Junta de Andalucía dio un golpe de estado a una decisión de acuerdo de gobierno que pasaba por mantener los puntos del programa pactado y que no le dio la gana de cumplir, eran propuestas demasiado a la izquierda como para llevarlas a cabo, la acción de Morales en Granada en vivienda creó cientos de puestos de trabajo y 1.200 rehabilitaciones de infraviviendas y a través del plan eficiencia energética 1.300 viviendas públicas fueron mejoradas.
Pero es más, en la Junta Municipal de Distrito Norte, nunca, un delegado del gobierno andaluz se asomó por allí para dar la cara de su gestión y de los problemas de vivienda y de los famosos cortes de luz, y Morales lo hizo, y desde que tomó las riendas en fomento y vivienda empezaron a tomarse en serio a las mafias que roban la luz a los vecinos y vecinas de norte, nunca antes se vio nada igual. Que siguen los cortes, pues claro, hacer la vereda del torpe es fácil y genera alarma, pero no deja de ser torpe, porque todos sabemos cuantas partes implicadas hacen falta para seguir desmantelando a los mafiosos, nos se rían de los afectados ni les engañen, que esto es serio, no se quita un quiste de décadas por cuatro arengas populistas.
Hoy todo esto se ha borrado de un plumazo. La candidata apasionada por los andaluces se olvida de las clases bajas, claro, para ella como para Pedro Sánchez solo existe clase media, el 31% de andaluces en situación de pobreza no existen, y se ha quedado tan pancha eliminando con cero transparencia y con los tejemanejes a los que históricamente nos tiene acostumbrados este partido de estómagos agradecidos, de clientelismo y de externalizaciones de servicios públicos que solo llevan a la precariedad de la mayoría social, se ha cargado, como decía, las ayudas para rehabilitación de infraviviendas en Almanjayar.
Así es el PE (lo de socialista y obrero hace décadas que lo perdieron) , con ausencia total de conocimiento a los vecinos y vecinas afectadas, y con toda la alevosía de vender electoralmente un plan de construcción sostenible, al que se derivan los 15,5 millones de euros robados a rehabilitación de viviendas en Andalucía y una parte de ellos destinada a Almanjayar, para poner toldos y ventanas, y a los que cualquiera puede acceder sin criterio alguno de renta. Tengas o no ingresos, y cobres lo que cobres puedes conseguir estas ayudas, y lo de los más necesitados a tomar viento.
Desde luego que IU apoya la construcción sostenible pero bajo ningún concepto robando a los pobres, a los que tienen viviendas con humedades, con goteras, con agujeros, con paredes destrozadas, a costa de esto, no.
No se preocupen que IU nos encargaremos de informar en Almanjayar de sus trampas y su atraco al derecho a tener una vivienda digna. No se preocupen porque mientras ustedes juegan al engaño, al populismo, y a la prensa fácil, en IU puerta a puerta, boca a boca, desmantelaremos sus mentiras y pondremos en evidencia lo evidente, que una vez más, y tras echar a IU por hacer políticas de izquierdas, vuelven a hacer lo de siempre en norte, o sea, nada.
Os invito a visitar la página de la asociación andaluza de barrios ignorados. Para tomar nota de quien es quien y cual es su lucha http://www.barriosignorados.org/index.php/nuestros-barrios#resumen7
No hay comentarios:
Publicar un comentario